Cosas de princesas. Los estereotipos en los cuentos (3-6 ños)


Seguimos con la dinámica del taller: <<Jugando con las palabras>>.

El diálogo empezó haciendo un pequeño resumen de las sesiones anteriores. Hablamos de la posibilidad de percibir olores y sensaciones sin necesidad de estar presente en un lugar tras ver la foto de una cabrito de 4 días.

Imagen propia

Esa foto huele a cabra. (¿A qué refieres con eso? ¿A caso podemos percibir el olor a través de una imagen?) Por supuesto. Depende de cómo sean los colores, las líneas, el espacio,… todo lo que está en la imagen hace que se pueda oler la imagen. (Solveig 5 años)

Es verdad, si vemos una caca en una imagen, sabemos que esa imagen va a oler mal. Porque la caca huele mal. No hace falta olerla en la verdad para saber que huele mal a caca (Clara 4’5 años)

-Pienso como ella. Porque en la imagen hay cosas que vemos y sabemos como son (Amaia 4’5 años)

La imagen, recordamos la sesión Las imágenes en palabras, la interpretamos y nos traslada a sensaciones a través de la memoria y el recuerdo. El pintura, la poesía, la escultura,… tiene esa cualidad.

Cosas de princesas, un cuento que ya fue trabajado con anterioridad hace unos años. (ver diálogo)

En esta sesión y en relación a la pasada fecha del 8 de marzo, día internacional de la mujer. Trabajamos a través del cuento la igualdad de género rompiendo los estereotipos de los cuentos y analizando aspectos del día a día.

Hemos crecido leyendo y escuchando cuentos infantiles totalmente estereotipados. Las escenas de los mundos de fantasía están cargadas de sexismo. Los perfiles físicos, emocionales, las actitudes o las actividades que cada personaje realiza están llenas de estereotipos sobre las mujeres y los hombres.


El lobo siempre es el malo, las débiles princesas siempre tienen que ser rescatadas por un príncipe valiente, la mujer siempre tiene actitudes pasivas en el entramado de la historia y realiza trabajos relacionados con los cuidados de la casa o de otras personas.


Esta actividad pretende mostrar al alumnado un cuento diferente en el que se muestra una princesa independiente y con las mismas capacidades que el príncipe.

Resultado de imagen de cosas de princesas de Jose Angel de la Banda
Portada «Cosas de princesas»

«Cosas de princesas» un texto de José Ángel de la Banda, con el que hemos trabajado para desarmar los estereotipos de género típicos de los cuentos infantiles.

Tras la lectura de la primera parte del cuento, en la que el príncipe va a salvar a la princesa, pero que no sabemos qué pasará después. comienza el diálogo:

  • ¿Cómo creis que va a continuar al historia?
    • El príncipe luchará con el dragón, y lo lanzará por la ventana. El dragón muere y la princesa y el príncipe se hacen amigos y juegan juntos.
    • La princesa está luchando contra el dragón. Porque tiene valor. El cuento dice que la princesa es valiente. Entonces tira al dragón por la ventana y se muere.
    • No pasa nada, porque no hay nadie. Todo ha desaparecido.

  • ¿Qué historias cuentan los libros de princesas? ¿Cuántos libros conocéis? ¿Qué ocurre en esos libros? ¿Cómo son los libros de princesas?
Los libros son raros. La princesa nunca tiene valor. Hay que tener valor para que nadie te rescate y te puedas rescatar tú sola. Si una persona no tiene valor, no puede ser feliz. (Solveig 5 años).
Siempre se rescata a una princesa, pero yo tengo libros que no. A veces, las princesas no necesitan ser salvadas porque también son valientes, ingeniosas y fuertes. (Clara 4'5 años)
Las princesas, como Rapunzel que tiene el pelo muy largo, tienen que ser salvadas. Las princesas no necesitan ser salvadas, solo necesitan ser escuchadas. (Amaia 4'5 años)

Hablamos sobre el concepto de valor, su significado y utilizamos «ser valiente» para entender el concepto de valor. Poniendo ejemplos del día a día.

Anécdota graciosa:
«Rapunzel, no puede ser valiente. Porque yo soy valiente cuando voy sola en la bici y no tengo miedo a caerme. Pero Rapunzel, se caería con el pelo tan largo y no puede ser valiente porque tendría miedo a caerse por el pelo» (empieza una pequeña discusión sobre ir en bici y tener el pelo largo, una discusión de lo más divertida).

  • ¿Crees que las princesas pueden hacer las mismas cosas que los príncipes?
    • Claro, las princesas son como los príncipes y los príncipes como las princesas. No sé porque siempre dicen que no. Creo que las personas que dicen que no es porque no ven a la otra persona como persona. Quizás la ven como otra cosa que no es persona.
    • Pero a veces, las princesas no pueden hacer algo y necesitan ayuda. Las princesas son como los príncipes, son iguales. Solo tienen que ayudarse cuando uno de los no puede hacer algo y necesita ayuda. Entonces no son iguales porque no pueden hacer la misma cosas. Como cuando mi papá ayuda a mi mamá o mi mamá a mi papá.
A ver, aquí hay un tema interesante. Y es que, tanto en princesa como en príncipe, los dos son personas, y solo, por ser personas, aunque no sean reales, que son de los cuentos, deben ser iguales. Todas la personas somos iguales. La desigualdad solo es cuando, como ha dicho ella (hace referencia a Clara), una persona no sabe hacer algo y necesita la ayuda de otra persona. Pero no por ser princesa o príncipe, o tener la piel azul (color de la piel del príncipe del cuento) o marrón, o ser ciego o no saber hablar,.. tiene que haber una desigualdad. Pero la desigualdad se arregla cuando la persona que está ayudando enseña a la que no sabe para que aprenda. Y cuando ha aprendido, desaparece la desigualdad y aparece la igualdad (Martín 8 años)

Tras un interesante diálogo entre la igualdad y poniendo ejemplos de aspectos del día a día, hacen un dibujo sobre cómo se imagen los personajes (se me olvidó hacer foto a los dibujos). Pasamos a la segunda parte de la historia.

Conclusión final:

La princesa no necesita ser salvada, no corre peligro. 
Hay que pensar antes de actuar. 
Se puede ser enorme, gordo y peludo y ser bueno, no tiene porque ser malo. 

El cuento con el que se ha trabajado ha sido descargado de SED

Machismo, ¿Por qué?

Una de las lacras de nuestra sociedad es el machismo, cuya esencia reside en la afirmación y justificación de la supremacía masculina a partir de la fuerza bruta como mecanismo de poder.

Sobre el origen del machismo es difuso. No podemos saber con exactitud cuándo o en qué momento empezó a formarse. Si echamos la vista atrás hacia las sociedades prehistóricas, se considera que en estas sociedades no existía una división de género en cuanto preponderancia del hombre sobre la mujer, sino que se trataba de una división del trabajo por sexos. Quizás podría considerarse que fue en el momento de la sedentarización y, con ello, la aparición de las primeras sociedades guerreras cuando se empezó a fraguar la opresión masculina sobre la mujer.

Una de las razones, entre otras, podría ser la necesidad que tenía las diferentes sociedades o culturas de armarse con un equipo bélico para cargar contra otros grupos, en estos casos, se consideraba la mujer como un ser débil, en cuanto a fortaleza, y, por ende, debía quedarse al cuidado del hogar. De esta manera, paulatinamente se fue relegando a la mujer. «Fue así como el mayor desarrollo muscular y fuerza física confirieron al varón
una ventaja que él utilizó para extender su dominio a otras esferas de la vida.»

Fuente: Pixabay

Cabe comentar, que si echamos un ojo a la historia, nos encontramos que toda la tradición histórica está repleta de machismo. Quizás, en parte, porque sus redactores fueron hombres, los cuales, ven en la mujer el fruto prohibido y la portadora de todos los males. La cruz con la que tuvieron que cargar la pobre Eva y la pobre Pandora, fue la sentencia heredada para todas sus descendientes que tuvieron que aguantar y aguantan, de esta manera, la superioridad masculina.

Volviendo al campo de batalla, la mujer no podía competir contra el hombre en las civilizaciones conquistadas, pues, era el sexo débil, de ahí que tras una conquista en casos de guerra, sea la mujer la que es violada, mutilada y sometida a todo acto inmoral. A medida que el hombre fue ganando su papel de ser superior ante una mujer ya sometida, un poder en el que se basa única y exclusivamente en la superioridad física, y con la apropiación de las instituciones religiosa, -no hay que olvidar el poder social que la religión tiene en la formación y continuidad de las culturas y sociedades-, queda, por lo tanto, la mujer arrodillada y subyugada a la voluntad de lo masculino.

Entre los grabados de la serie ‘Los Desastres de la Guerra’, el aguafuerte titulado ‘No quieren’, de Goya.

La mujer, queda apartada de todo aquello que hoy consideramos un derecho, como es la educación, el poder de decisión, el acceso a la información, la capacidad de leer y escribir,… se funda así la “hombría”, donde la literatura, pintores, escultores, pensadores tendrán nombres masculinos, y las mujeres quedan en un papel secundario dentro de la existencia humana.

Ante todo lo descrito, aunque de manera superficial, creo que este pensamiento y este desencadenamiento de hechos discriminatorios contra la mujer son fruto del temor. De un temor del que habla ya Helen von Druskowitz, filósofa austriaca, el hombre sabe que vive engañado y no puede perder los privilegios con los que goza porque se trataría de un acto vergonzoso para su orgullo. Ese hombre fuerte y valiente en el campo de batalla, no puede ser humillado en plena guerra, perdería así el respeto y su dignidad.

En la actualidad, no encontramos este hecho solo en las sociedades más intolerantes, en las cuales siempre han extendido su incompetencia hacia las mujeres, también en las sociedades menos avanzadas culturalmente, y, de hecho, sigue siendo un lastre en los países con mayor progreso ,en los que, entre otros aspectos no existe una paridad real, viéndose esa paridad como un concepto inalcanzable, utópico.

“El súmmum del machismo en la actualidad tal vez se halle en vilezas tales como las condenas a muerte en países musulmanes a las mujeres por supuestos delitos de adulterio, o únicamente por ir a la escuela; y especialmente en la ablación, que no es más que el reconocimiento por parte de los hombres que la practican de que tienen un verdadero pavor a equipararse con las mujeres. Igual que no se puede acostumbrar al esclavo a la buena comida, porque entonces exigirá más, no puede permitirse que la mujer disfrute de su sexualidad, pues luego reclamará otras prerrogativas similares a las del varón. El machismo se justifica simple y llanamente con el poder y el egoísmo masculino”(1)

A favor de la paridad, surgen los movimientos feministas. El feminismo, que surge en en el siglo XVIII, y sus etapas posteriores, no surgirán como una contrapartida al machismo, básicamente porque las mujeres se unieron para dar forma a un colectivo que busca elevar la condición política, socio-económica y educativa de la mujer. A fín de cuentas, surge como un movimiento básico de la libertad humana en tanto que afecta a la mitad de la humanidad (2).

¿Qué es el feminismo y cuál es su importancia?

Fuente: Pixabay

  1. Roselló, Gabriel. Proyecto humano.
  2. Martín Gamero Amalia. Antología del Feminismo, Madrid. Alianza.

Mesa redonda: Perspectiva de género. Un feminismo en vías de desarrollo

La mesa redonda se llevará a cabo a través de ZOOM. Se enviará un email de confirmación junto con el enlace dos días antes de la reunión.

¿Te perdiste el filocafé? Kein Problem!

  • Disfruta del audio a través de:
  • Lee la síntesis:
    • SINTESIS:


Una de las lacras de nuestra sociedad es el machismo, cuya esencia reside en la afirmación y justificación de la supremacía masculina a partir de la fuerza bruta como mecanismo de poder. Afirmaba Celia Amorós que el pensamiento patriarcal consiste en el no pensamiento acerca de las mujeres, es decir, leer una historia escrita por hombres, cuyos saberes heredados han sido contados por solo una mitad de la población. La otra mitad, mujeres, han permanecido calladas y sumisas.

En el siglo XVIII comenzó un lucha que tiene que ver con el acceso al espacio público y político por parte de la mujer. Surge así los primeros feminismo, un feminismo que sigue hasta nuestros días, pero cuyas aspiraciones y manifestaciones van más allá de lo público y político. Los feminismos del siglo XX empiezan a cobrar un importante papel en la esfera pública -otorgando mayor visibilidad a la mujer-, una aparente igualdad formal, adopción de medidas frente a la violencia de género,…

El feminismo, hoy, se encuentra dentro de una problemática mayor, debe contextualizar sus demandas y reivindicaciones entorno al neoliberalismo, la homosexualidad, la violencia de género, el sexismo, la identidad…

¿Dónde queda la emancipación de la mujer y la lucha social por la igualdad en este contexto? ¿Qué significa ser feminista en una era donde el feminismo tiene diversas vertientes? ¿Qué avances estamos viendo en los grandes temas feministas como en la violencia de género? ¿Qué ocurre con la figura de la mujer ante la dicotomía entre sexo-género? ¿Ante qué retos se enfrenta el feminismo hoy?


PONENTES:

Para profundizar en este tema tenemos el privilegio de contar con:

Lorena Hernández Pineda: Psicoterapeuta especialista en violencia de género. Maestría en Intervención Interdisciplinar en Violencia de Género y Terapia Emotivo Conductual. Colabora con varias asociaciones feministas e imparte charlas y talleres desde el 2020.

Alejandra Guillermo Teos: Activista feminista y miembro de la asociación Las Cigarreras en Sevilla. Técnica en producción de alimentos y estudiante de medicina en la Universidad de Sevilla.

Laura Juliana Gamboa Bonilla: Estudiante de Filosofía y Educación Básica Primaria en la Universidad Industrial de Santander. Coordinadora del semillero de investigación filosófica Filoepos. Columnista de la Revista de la Universidad del Bosque de Bogotá, Horizonte Independiente y Filosofía en la Red.

Miguel Ángel G. Calderón: maestrante en filosofía en valores, lic. en psicología organizacional, enfermero, estudiante de lic. en filosofía; responsable de filosofía en la red: una de las plataformas de divulgación filosófica más importantes en habla hispana.


Bibliografía, artículos y enlaces de interés:
(se irá completando)

VV.AA: «Filósofas: del olvido a la memoria». Colección Tábano, Ed. Diálogo

Pagés, Ana: Cenar con Diotima: Filosofía y feminidad. ed. Herder

Amorós, Celia (coord.): Feminismo y Filosofia, Síntesis, Madrid 2000.

Beaviour, S: El segundo sexo Ed. Cátedra

Butler, J: Deshacer el género, Paidós Estudio 167

Butler, J: El género en disputa. El feminismo y la subversión de la identidad. Paidós

Friedan, Betty: La mística de la feminidad , Cátedra

Wollstonecraft, Mary: Vindicación de los derechos de la mujer– Cátedra,

Videos:

El cerebro de los hombres

El cerebro masculino. A la carta RTVE. Redes

La batalla de los sexos. A la carta RTVE. Redes

Feminismos Post-Género y Transidentidad Sexual por Rosa María Rodríguez Magda

Alícia Miyares cuarta Ola de feminismo no somos solo cuerpos

Debate Prostitución Amelia Valcárcel

Conceptualizar la violencia de género. Celia Amorós

Documentos/artículos:

Construyamos un cuento (3-6 años)

Seguimos con la dinámica del taller «Jugando con las palabras».

Antes de empezar la sesión es necesario hacer una recapitulación de lo que hemos trabajado hasta el momento. Es importante que los niños y niñas sigan la dinámica para que el objetivo último: La expresión y el valor de las palabras quede optimizado. De ahí que se le pida a los niños y niñas, con el material ya utilizado, hacer un resumen a esos compañeros/as que no han podido asistir a algunas de las sesiones.

En esta recapitulación volvemos a recuperar la definición de Palabra y su utilidad como ya vimos en: «: El mundo de las palabras. Los nombres de las cosas o las cosas y sus nombres«

  • Las palabras sirven para hablar y decir las cosas de nuestro pensamiento.
  • Las palabras no las podemos ver, pero sí las cosas.
  • Hay palabras que son iguales pero significan diferente
  • Son importantes para comunicarnos

El hecho de que sean importantes para comunicarnos, no quiere decir que sea la única vía de comunicación, porque como ya vimos en «Las imágenes en palabras. La palabra muda.» Se puede comunicar sin decir palabra.

  • Claro un semáforo rojo dice que tienes que parar. Es una imagen.
  • Esta cara está contenta pero no pone la palabra contenta
  • Está está loca, y no pone que está loca.

Una vez hecha la recapitulación y explicado sobre el tema del taller. Nos introducimos en la 3ª sesión del taller: «Construyamos un cuento».

Surge la primera cuestión: ¿Os he contado alguna vez el cuento del niño chino?
Nunca han escuchado el cuento del niño chino. Pero, espera, antes de hablar del cuento, necesitamos saber qué es un cuento. Estás son las cuestiones que nos invitaran a reflexionar y dialogar sobre el cuento.

Sobre estas preguntas: Cuando alguien dice sí, debe dar razones sobre esa respuesta, se le puede ayudar con ejemplo o con la participación de otros compañeros. Cuando alguien dice no, deberá pensar o crear un cuento que no tenga lo que se le pregunta.

l. ¿Tiene un cuento que tener un principio?

  • Sí, porque sino no sabemos cómo empieza la historia.
  • Sí, pero que no empiece por «Érase una vez…» que es muy pesado.
  • No, hay cuentos que empiezan sin tener principio. No sé cual. Por ejemplo: (ayudamos entre todos, cuesta mucho empezarlo) «La chica se fue con sus papas de viaje a casa de su tío a España» (en este cuento no decimos qué chica es, ni dónde vive, no se da información previa sobre ella)

2. ¿Es necesario que un cuento tenga un final?

  • Sí, porque sino no sabemos cuando acaba. Todos los cuentos tienen que tener un final.
  • No, pueden haber cuentos sin un final. Para que la niña o el niño piense sobre el final que quiera.

3. ¿Tiene un cuento que ser verdadero?

  • Por supuesto que no. Yo odio los unicornios, y los cuentos de unicornio no son verdaderos porque los unicornios no existen.
  • No, son verdaderos porque los animales no pueden hablar y en los cuentos hablan.

4. ¿Puede un cuento ser sobre animales?

  • Sí, por ejemplo los tres cerditos
  • Grufallo, también salen animales.
  • Sí, un cuento puede ser por cualquier cosa.

5. ¿Es posible que un cuento trate de cosas que no están vivas?

  • Por supuesto, es como antes. Los unicornios. Odio los unicornios, no me gustan, están muertos, bueno, no existen y hay muchos cuentos sobre unicornios.

6. ¿Puede haber un cuento sin palabras?

  • Sí, en la la otra clase se contó un cuento con imágenes.
  • Mi cuento de Grufallo no tiene palabras.
  • Yo también tengo cuentos sin palabras

7. ¿Puede haber un cuento sin pensamientos?

  • Eso es imposible, un cuento tiene que salir de la cabeza.
  • Claro, un cuento está primero en el pensamiento y después se escribe o se dibuja.

Después de todas las preguntas y las respuestas, lanzamos la última pregunta. ¿Qué convierte a un cuento en un cuento?

  • Pues que tiene que ser pensado.
  • Que puede tener imágenes o palabras.
  • Tiene que tener un principio, porque sino cuesta mucho de empezar.
  • Puede no tener final.
Imagen de Fantasía, Sueño y Astronauta. De uso gratuito. Licencia de Pixabay

Después de la parte «teórica» tocó llevar a la práctica lo que habían estando respondiendo. Y, por supuesto, contar el cuento de «El niño chino»

Para esta actividad, cada uno de los niños debían elegir un único objeto de la clase. A la hora de seleccionar el objeto debían preguntarse por qué ese objeto y no otro. Ese objeto era importarte para contar el cuento del niño chino. Una vez con el objeto en la mano y vuelto cada uno/a a su sitio. Cada uno de los niños y niñas deben introducir su objeto en el cuento, al mismo tiempo que siguen la historia. El cuento tiene que tener un principio, un nudo y un final. Ellos y ellas solo saben que tienen que ese objeto es necesario para meterlo en la historia, no que van a construir el cuento.

Comenzamos el cuento de «El niño chino», pero… ¿Cómo empieza el cuento? ¡NO ME ACUERDO!

¡CONSTRUYAMOS EL CUENTO!

Así quedó el cuento de «El niños chino»:

Hola me llamo el niño chino y me gusta jugar a la peonza, pero poniendo la tortuga de navidad encima, para que de vueltas, y vueltas, y vueltas, y vueltas, y vueltas, y vueltas,... así hasta 10 veces. 
Y cuando me aburro juego con el juguete del martillo, para golpear unas "eses". Y también me gusta jugar con las flores para construir. Por ejemplo, puedo construir un avión para volar a China, porque en China hay animales, chihuahuas, un tren, un mura grande,... también puedo construir un baño, una casa, un botón,...
Un día mientras con las piezas de flores construía un chihuahua. El perro quería ser de verdad y quería pasear y él se perdió. El niño chino no sabía que el chihuahua se había subido a la peonza y se había puesto a dar vueltas, y vueltas, y vueltas, y vueltas,... hasta que salió volando hasta Alemania. Donde se encontró con una peonza. Pero lo gracioso era que era la misma peonza con la que voló a Alemania, ¿Qué curioso no? ¿Cómo pudo ser?. 
De todas formas, el chihuahua ya no quiso volver. Allí dijo adiós directamente y este cuento del niño chino se ha acabado. 
¡FIN!

¿Os cuento el cuento de «El niño chino»?

  • (Por unanimidad. Leo el cuento)

¿Qué os ha parecido el cuento de «el niño chino»? ¿Cómo se ha creado el cuento?

  • Pues con nuestro pensamiento
  • Con nuestras palabras
  • Con nuestros objetos.

¿Qué se necesita para que un cuento sea cuento?

  • Tener pensamiento
  • Objetos que nos ayuden a pensar
  • Nada

Finalizamos la sesión como siempre: ¿Con qué os quedáis de la sesión de hoy?

  • Con el cuento del «El niño chino»
  • Con el final: «Adiós».
  • Con todo
  • Con los dados

Esta actividad fue seleccionada del «Manual para acompañar Hospital de Muñecas- Entendiendo mi mundo» de A. Sharp y L. Splitter. Capítulo 3 Idea Principal 7: ¿Qué es un cuento?

Las imágenes en palabras. La palabra muda (3-6 años)

Las palabras son un signo lingüístico que sirve para comunicarnos. A partir de los 3 años, los niños y las niñas se convierten en grandes preguntones. El mundo que les rodea es inmeso y, por eso, sienten la necesidad de ampliar su vocabulario para conocerlo mejor. De esta manera a sus qué, por qué, cómo, dónde, quién se añaden una de las palabras de su vocabulario para ampliar.

En esta sesión «Las imágenes en palabras. La palabra muda» de Jugando con las palabras. Los niños y las niñas reflexionaron y dialogaron sobre la importancia del objeto o las cosas para ponerle un contexto y una palabra o concepto. Se trabajaron las palabras a partir de imágenes y cómics (sin rellenar), estos materiales recuerdan al cine mudo. En ninguna de estas vías hay palabras y, por supuesto, tampoco música. Solo por lo que percibes a través de la imagen puedes pensar en la historia, o los conceptos. Aprendemos de esta manera a leer y conocer solo a través de la imagen.

Para introducirnos en este tema, lanzamos una cuestión:

¿Existen las palabras? ¿Dónde existen las palabras?

Las palabras solo existen en mi pensamiento. No las vemos como vemos una silla. La silla no es la palabra silla. Las palabras no las podemos ver, las cosas sí

Clara 5 años
  • Las palabras existen, pero no todo tiene una palabra.
  • Las palabras son todas las cosas. Todas las cosas existen porque tienen palabras.
  • Pero, una persona que no ve nada, conoce las cosas sin verlas. Conoce las palabras sin ver las cosas.
  • Claro, una persona que no sabe hablar, por ejemplo un bebé o mi hermano o una persona que no sabe hablar (muda). Pues puede ver las cosas pero no saber la palabra.

(en menudo follón nos hemos metido en este momento, pero conseguimos salir de él)

Las palabras tienen siempre una representación según la deducción que han hecho. Pero, aquí el primer problema. ¿Qué sucede cuando algo tiene una palabra pero no tiene una representación física como una silla, o una luna, o una puerta? Utilizamos como ejemplo el silencio.

¿Cómo puedes representar el silencio? Dibújalo

(después de un rato sin dibujar nada)

El silencio representado como un papel en blanco. Sin sonido, ni ruido. nada.

Si hemos dicho que todas las palabras tienen una representación. El silencio también se puede representar, ¿no?

  • Pues no, porque el silencio es nada.
  • Bueno, el silencio es como ir a la playa y solo haya olas, sin pájaros y sin niños que molesten.
  • El silencio es… silencio.

¿Y el amor? ¿Nosotros vemos el amor?

El amor se representa con un corazón, porque sin corazón…¿No podemos vivir? (Marlon)
  • La palabra no, porque las palabras no se ven.
  • Sí, lo vemos cuando nos dan un abrazo.
  • Cuando mi Papá me cuida cuando estoy malita.
  • Además el amor se puede representar

A continuación algunas de las imágenes a las que los niños y niñas tendrán que poner palabras/historia/sucesos y darán lugar al diálogo:

¿Qué sucede en esta imagen?

  • El hombre está buscando algo
  • Claro, está buscando palabras.
  • ¿Puede haber libros sin palabras y sin nada? Si no hay palabras no puede haber una historia.
  • El hombre tiene gafas para ver si así ve mejor las palabras, pero no sabe que no hay palabras, y no las va a ver. Porque las palabras no se pueden ver, pero sí las cosas. (aquí vemos como ha cogido algunas de las ideas del diálogo anterior)

Niños jugando en la playa. Mary Cassat

¿Qué palabra le pondríais a esta imagen? Solo una

  • No sé
  • Jugar
  • Divertido
  • Cubo
  • Niñas

¿Podrías contar o decir algo de esta imagen?

  • Dos niñas juegan en la playa y están tristes porque sus papás han dicho que ya se tienen que ir porque mañana hay KITA
  • Dos niñas juegan en la playa, y una niña está triste porque no tiene sombrero.

Describimos la imagen y formamos la siguiente historia.

«Una niña se despierta por la mañana con los pelos locos. Coge un peine y se pone a peinarse. Después de 100 horas peinándose se pone guapa. Pero por culpa de peinarse ha llegado tarde a la KITA.«

  • Por eso es mejor no peinarse.

Cierre:

Después de una sesión increíble, en la que hemos aprendido sobre la posibilidad de conocer sin palabras, jugado a un juego de mímica como forma de expresión y deducir que para poder comunicar y conocer el mundo, no solo existen las palabras, sino que también las imágenes- representaciones y las expresiones. Y la pregunta final: ¿Con qué os quedáis de esta sesión?

  • Con la chica que al final no ha ido a la KITA porque ha tardado mucho tiempo en peinarse.
  • No sé. (Pero no sé no se acepta como respuesta en este momento) Con ponerle nombres a las caras y hacer la cara loca.
  • Con el hombre que busca palabras cuando es un libro sin palabras. ¿Cómo va a buscar algo que no existe?

Imagen: «Niños jugando en la playa» de Mary Cassat. Extraida de ArteHistoria

El mundo de las palabras. Los nombres de las cosas o las cosas y sus nombres

El lenguaje es un instrumento humano y un vehículo al servicio de la comunicación, del conocimiento y de las relaciones sociales. Trata una ordenación abstracta del mundo producida por la comunidad, pero que se actualiza en el discurso individual. De ahí que cumpla una función simbolizadora que construye un mundo de objetos o de significados que actualizamos en nuestros discursos. Nos relacionamos con la realidad a través del lenguaje, << una forma de vida>> como diría el filósofo L. Wittgenstein. Con ello quiere decir que tiene en su base una cultura.

Las palabras, dentro de ese lenguaje no son meros recipientes prefabricados para archivar en ellas ideas. El mismo pensar ya es lingüístico, dinámico e interpretativo.

Lenguaje, conceptos y palabras se desarrollan desde la edad temprana. Ese momento en que los niños y niñas sienten una creciente interés por los objetos y las acciones a ejecutar. Se crea el periodo sensitivo del desarrollo del lenguaje, creando las bases para el aprendizaje significativo de las palabras, su relación con los objetos que se les presentan y con los fenómenos del mundo que les rodea.


Algunas de las cuestiones con las que se trabajó la sesión

¿Qué es el lenguaje?

  • Es eso que sirve para hablar con otras personas.
  • También sirve para hablar con lo que está dentro de la cabeza. ¿A qué te refieres? Yo a veces hablo con mi cabeza. ¿Entonces quieres decir que el lenguaje es la conversación o diálogo que mantienes contigo misma dentro de tu cabeza? ¿Puedes poner un ejemplo para que lo entendamos todos? Sí. Por ejemplo, yo puedo pensar quiero comerme un helado, pero como me acabo de lavar los dientes no puedo. Entonces eso que acabo de decir lo digo en mi cabeza.

¿El lenguaje solo es hablar? ¿Podemos comunicarnos sin hablar?

  • Claro, por ejemplo los semáforos. Los semáforos no hablan pero nos dicen que si está la luz roja no podemos pasar, porque puede pasar un coche.
  • Y los animales. Los animales no hablan, pero hay personas que saben lo que quieren.

¿Qué son las palabras?

  • Las palabras son las cosas que decimos.
  • También son las cosas sin decirlas. ¿A qué te refieres con eso? Que son las cosas que tienen nombre sin decir el nombre. Eso es una silla pero yo sé que es una silla sin decir que es una silla. Entonces eso es la palabra.
  • Sin palabras no podemos conocer.

Pero, ¿qué pasa cuando una palabra representa dos cosas diferentes? ¿Cómo podemos conocer algo que suena igual pero tiene diferente significado? ¿Y algo que tienen mismo significado pero se pronuncia diferente debido al idioma?(trabajamos el problema de la polisemia y el bilingüismo)

Trabajamos con estas dos imágenes:
Banco= die Bank
Banco= der Fischzug
  • Las dos son unos bancos. Pero uno son muchos peces y otro es para sentarse.
  • Solo podemos saber a qué te refieres cuando dices una frase de ellas. Como lo que has dicho o, por ejemplo, «fui al aquarium y vi un banco de peces» o «estoy muy cansada, voy a sentarme en el banco». Solo así sabemos la diferencia.

Trabajamos el tema de la generalización de las palabras con imágenes de diferentes árboles. Piensan en un oso y describen el oso, después deben decir si el oso que han pensado es el mismo que el de la imagen. Al no ser el mismo oso, ni ser el mismo árbol, pero aun así se le llama oso y árbol, hace que nos preguntemos sobre la hiperonimia, es decir, una palabra que engloba a muchas otras, por ejemplo, en este caso «Árbol» es el hiperónimo de «manzano», «peral», «roble»,….

Para trabajar el bilingüismo, la polisemia, los conceptos y el lenguaje. Se propone las siguientes actividades que darán lugar a la finalización de la sesión.

Nombrar: 
Había una vez una niña llamada Paula. a Paula le gustaba poner nombre 
a las cosas. 
Llamó a su perro Sal y a su gato azúcar. 
Llamó a la casa en que vivía Hogar. 
Después de un rato se quedó sin cosas a las que poner nombre. En vista de lo cual llamó a su cabeza Isabel, a sus manos Zurdita y Diestrita, y a sus pies abbott y Costello. 
Cuando se quedó sin partes del cuerpo a las que poner nombres, se preguntó a que más le podría poner nombre. 
«Ya sé, me queda mi nombre, Paula» se dijo a sí misma. 
«Paula es mi nombre pero, ¿cuál es el nombre de Paula? Lo que quiero decir es que cuál es el nombre de mi nombre» 

¿Qué nombre crees que le dio Paula a su nombre, y por qué?
Inventemos una lengua 
Tus alumnos están visitando otro planeta cuyos habitantes tiene la extraña costumbre de inventar una lengua nueva todos los días. Para imaginar cómo es esto, escribe en la pizarra algunas de las palabras más importantes y comunes que los niños conozcan (no demasiadas). Elige palabras como amigo, comer, jugar, casa, grande, cuento, dormir, o hermana. 
Ahora invita a los niños a hablar al resto de la clase sobre alguna de estas palabras, usando palabras inventadas en vez de las reales. 

Por ejemplo: Tengo un pitifu (amigo) que se llama Roberto. Cuando voy a su blup (casa) siempre me invita a nirati (comer) ... 

El objetivo de este juego, aparte de simplemente divertirse con el lenguaje, es averiguar cuánto podemos entendemos entre nosotros cuando 
hablamos una lengua que hemos inventado.
Ejercio extraido de: "Manual Hospital de muñecas" ed. La torre

Se cierra la sesión concluyendo que:

Las palabras son importantes para conocer las cosas que nos rodean, pero tenemos que saber en qué cosas se usan y de qué manera para poder referirnos a algo. Sin palabras no hay lenguaje, y el lenguaje es necesario para poder configurar nuestra experiencia en el mundo. 

Y dejamos una interrogación abierta para tratar en la próxima sesión

Pero, ¿qué pasa con aquello que tiene palabra pero no tiene imagen o cosa? ¿Cómo la conocemos?

Jugando con las palabras. Taller

Jugar proviene del latín iocāri ‘hacer algo con alegría’. A su vez proviene de iocus ‘broma’

Palabra del latín parabola tomada del griego antiguo παραβολή (parabolḗ) ‘comparación, alegoría’


Las palabras expresan ideas. Alguien puede escribir una palabra en un trozo de papel y después destruir el papel o borrar la palabra. Pero eso no significa que haya destruido la palabra. Solo se ha destruido la versión impresa de la palabra, los pequeños símbolos negros que estaban en el trozo de papel.

Las palabras son las porciones significativas más pequeñas de lenguaje. Combinamos letras para formar palabras pero las letras no tienen, en sí mismas, significado (excepto aquellas letras como, por ejemplo, «y» y «o», que actúan como palabras). Cuando combinamos palabras formarnos frases. Puesto que cada palabra tiene un significado, o un conjunto de significados, cuando formamos frases, seleccionamos las palabras que expresan el sentido que queremos expresar.

Por lo general, nunca pensarnos en este proceso. Nos limitamos a hablar o escribir frases, comunicando lo que queremos decir. Pero de vez en cuando decimos algo que no queremos decir, y esto nos da la oportunidad de volver atrás y repensar las palabras que hemos usado y cómo las hemos puesto juntas. A menudo nos damos cuenta de que hemos elegido la palabra equivocada o de que hemos unido las palabras de una forma que no comunica lo que pensamos. Cuando aprendemos a escribir, tenemos otra oportunidad más para transmitir lo que queremos decir y para expresarlo de una forma más clara.

Las palabras no tienen por qué decirse en voz alta. Se pueden decir silenciosamente para nosotros mismos. Este es un tipo de pensamiento, aunque puede no ser el único. Algunos niños son grandes pensadores verbales, mientras que otros prefieren pensar a través de dibujos o imágenes. Con frecuencia los niños se sienten fascinados por las palabras. También puede ser fascinante escuchar a una persona hablar en una lengua que no es la nuestra.

Los niños que crecen en hogares o comunidades bilingües tienen la maravillosa oportunidad de aprender a expresarse en más de una lengua, mientras que al mismo tiempo desarrollan la habilidad de traducir de una lengua a otra. El hecho de que dos palabras que suenan diferentes puedan referirse al mismo concepto puede ser muy impresionante para un niño pequeño.

Una comunidad de investigación permite a los niños aprender los diferentes estilos de pensar prestando especial atención a las formas en que piensan sus amigos.

Sesión 1: El mundo de las palabras. Los nombres de las cosas o las cosas y sus nombres.

Sesión 2: Las imágenes en palabras. La palabra muda.

Sesión 3: Construyamos un cuento.

Sesión 4: Leamos poemas. Interpretamos.

Sesión 5: Yo soy el cuento.

Sesión 6: El juego de las palabras.

Puedes descargarte el cuadernillo que se seguirán en las sesiones aquí:

Referencias bibliográficas:

Marqués Redolá, C, Marina, J.A ,García Moriyón F., Valores sociales y cívicos: 1º primara, Ed. SM

Marqués Redolá, C, Marina, J.A ,García Moriyón F., Valores sociales y cívicos: 2º primaria, Ed. SM

Marqués Redolá, C, Marina, J.A ,García Moriyón F., Valores sociales y cívicos: 3º primaria, Ed. SM

Sharp, A.H, Splitter, L.J. Manual para acompañar hospital de muñecas, Ed. La torre, Coord. García Moriyón, F.

Nomen, J El niño filósofo. Ed. Arpa

Ruiz, J.C El arte de pensar para niños. Ed. El toro mítico

Tanatopolítica: La muerte como gubernamentalidad del Estado

Aquella Paz Perpetua de la que nos habló Kant fue como un neonato fallecido, un niño que nunca nunca nació. La cruda realidad es que parece que nos enfrentamos a la pregunta si nos gusta ser controlados.

Hoy, nos debatimos en la filosofía política con términos como: biopolítica, biopoder, tanatopolítica, psicopolítica y necropolítica.

La tanatopolítica o necropolítica de Achille Mbembe

El libro Necropolítica publicado en el año 2011 por el filósofo camerunés, Achille Mbembe, es un estudio crítico de la forma en que el poder y la violencia se ejercen en el mundo moderno, en particular en el contexto de las colonias y los Estados postcoloniales.

El segundo capítulo del libro que trata sobre el gobierno de la muerte, se centra en la forma en que el poder y la violencia se manifiestan en la forma en que se maneja la vida y la muerte de los ciudadanos en el contexto de los Estados modernos.

Mbembe argumenta que el poder y la violencia se manifiestan de diversas maneras en el gobierno de la muerte, incluyendo la forma en que se decide quién vive y quién muere, cómo se determina la forma en que se muere y cómo se maneja la muerte y el duelo.

Achille Mbembe también argumenta que el poder y la violencia son evidentes en la forma en que se controla y gestiona la muerte en términos de su visibilidad y su invisibilidad, y en la forma en que se utiliza la muerte como medio para controlar y disciplinar a las poblaciones.

Esta no es la biopolítica de la que nos habla Michel Foucault, donde el Estado y su razón de gubernamentalidad dirige la vida de su población, la centralidad de esta gubernamentalidad es la muerte.

Mbembe sostiene que la muerte es una forma de poder, miedo y violencia que se ejerce tanto en el ámbito político como en el social, y que ha sido utilizada históricamente como medio para controlar y disciplinar a las poblaciones.

En el contexto de los Estados postcoloniales, Mbembe argumenta que la muerte sigue siendo una herramienta importante para el gobierno y el control, y que la forma en que se maneja la muerte refleja y reproduce las relaciones de poder y violencia que existen en la sociedad.

Puedes ver más de la Tanatopolítica en este video

Recomendaciones: Ensayos

¿Cómo el poder nos domina?  –La Guerra Perpetua
En esta trilogía, Marcos Represas, a partir de la visión de Michael Foucault, el filósofo del poder, aborda cómo el poder genera saber y cómo sujeta la subjetividad del sujeto, es decir, cómo es sujetada nuestra forma de pensar, sentir y vivir. Por último, cómo vencer la guerra.

Libro 1: CÓMO EL PODER GENERA SABER

Libro 2: CÓMO EL SABER GENERA PODER

Libro 3: CÓMO VENCER LA GUERRA


¿Nos sentimos amenazados?

Un ensayo magnífico de Bernat Castany. Escrito de una forma ágil y desenfadada, sin dejar de lado la profundidad y el rigor. El autor va desentrañando esa emoción que en nos suele nublar la razón, nos aparta del mundo y de los demás, y subestima nuestras resistencias.

UNA FILOSOFÍA DEL MIEDO


¿Por qué tememos al aburrimiento?

En este ensayo, Josefa Ros, analiza y explora las facetas del aburrimiento, “respondiendo a la necesidad de desambiguar algo que se muestra como cotidiano y existe desde que el mundo es mundo”.

En él se revelan una gran cantidad de curiosidades sobre esta emoción desde una perspectiva filosófica, psicológica, antropológica y existencial.

Puedes saber más en: Filocafé: ¿Por qué tememos al aburrimiento?

LA ENFERMEDAD DEL ABURRIMIENTO


¿Vivir para ser visto o ser visto para vivir?
Julia Lescano, arquitecta y escritora argentina, nos invita a reflexionar sobre un yo que se ha convertido en espectáculo. Un yo que vive prisionero de la exhibición y del hiperconsumismo.


Su autora con un lenguaje sencillo y claro hace un apasionante estudio entrelazando arquitectura y redes sociales.

VIDA ESCAPARATE


¿Será pronto el fin de la humanidad?

Su autor, Jesús Zamora, con su singular característica literaria -amenidad y humor- ofrece un conglomerado de argumentos con la finalidad de desmontar las principales tesis apocalípticas donde «La única actitud racional ante un debate que se refiere a asuntos dominados por la incertidumbre y la complejidad es la de no aferrarnos con demasiada vehemencia a nuestras convicciones morales, sean estas las que sean».

CONTRA APOCALÍPTICOS


¿Qué significa ser vulnerables?

Miquel Seguró invita al lector en este ensayo a pensar en la vulnerabilidad como <<una propuesta abierta a la rectificación>> en clave existencial.

Apoyándose en la obra de R. Descartes propone una vulnerabilidad a caballo entre la realidad existencial (pathos) y la realidad ético-política (ethos).

VULNERABILIDAD


¿Tengo derecho a no hacer nada?

Juan Evaristo Valls, respaldado de amplias referencias culturales, políticas y filosóficas, hace un llamamiento a favor de una vida basada en el ocio y la pereza. La inacción y la inoperancia como una revuelta contra la ideología de la productividad.

Filocafé: Pereza, ¿derecho o castigo?

METAFÍSICA DE LA PEREZA


¿Qué es la distancia?

Cuestionar la utilidad, la necesidad o la metafísica de la distancia es viable. Hiroto Uteki nos invita a recuperar los espacios perdidos en un mundo que busca continuamente acercarnos.

DURANTE LA DISTANCIA

Entre la sombra y la luz (Grupo 7-10 años)

Seguimos cuestionándonos la realidad al estilo Cartesiano. En primer lugar, se dudó de los conocimientos que nos aportan la Escuela y la Escuela misma (¿Para qué sirve la Escuela?), dudando así de los conocimientos que esta nos aporta y su utilidad. Después, dudamos sobre el estado onírico y la conciencia (¿Y si la vida es sueño?). Dudamos hasta de la propia vida (Pensamos la muerte). Para llegar a esta sesión: dudar de lo que percibimos a través de los sentidos.

El tema fue introducido preguntándonos por el mito. ¿Qué es un mito? ¿Conocéis algún mito? ¿Por qué se utilizan los mitos para explicar hechos de la realidad? (Se llevan a casa para leer una selección de mitos breves para leer y relacionarlo con la realidad y las explicaciones racionales)

– Un mito es como una historia que no es real.
– Es real cuando se cuenta, pero no se puede relacionar con la realidad. Por ejemplo el mito se explica para contar cosas que se desconocen.

– Claro, con el mito se resuelven las cosas que la ciencia no sabe, ¿no?
– En la actualidad no hay mitos porque sabemos muchas cosas y la ciencia y la tecnología, como Alexa, saben responder a las cosas que no sabemos.

El mito se utiliza para explicar de manera alegórica ciertos hechos, porque de esta manera se puede comunicar lo incomunicable como hace Platón, Filósofo griego (427-347 a.C). Introducimos el Mito de la Caverna.

A partir de la imagen, los niños y niñas deben ir interpretando el mito, sin previa explicación, deben ir dando ideas sobre lo que ven. Se van tapando cada una de las partes de la imagen, cuando está hecha la explicación pasamos a la siguiente parte. Así queda:

Imagen utilizada


1º Vemos unas personas sentadas viendo un jarrón, un pato y un árbol. Están apoyados en muro para que no les duela la espalda.

2º Vemos a una personas que están sujetando unos objetos. Los objetos son los mismos que aparecen en la pared. Son como las sombras de esos objetos.

3º El fuego, es lo que da la luz para que las imágenes puedan aparecer en la pared del fondo. El fuego es una luz artificial creada por las personas. Necesitamos el fuego para ver, porque nos da luz. También para estar calientes. Ahí dentro, no llega del todo la luz, los que están sentados no tienen calor, pasan frío porque están en la oscuridad. Tampoco pueden ver la luz del fuego.

4º Unas personas están intentando salir del lugar. Les parece aburrido lo que están viendo en el fondo y deciden irse. El primero de todos, como estaban en la oscuridad, se pone la mano en la cara para ver mejor. Como cuando estamos dormidos y se enciende de repente la luz. Nos hace daño la luz de golpe. Nuestros ojos deben adaptarse a la luz y a la oscuridad, por una cosa de la retina.

5. Están los mismos objetos que en la cueva. Pero esos objetos son más reales, no son creados por las personas, a no ser que el árbol si que haya sido plantado por un persona o se haya modificado el ADN de la semilla y la haya creado el hombre.

6. Las personas pueden ver las cosas mejor, porque hay más luz. El sol es una luz natural no creada ni inventada. Ilumina más que el fuego. Entonces, se puede ver el exterior mucho mejor.

7. Las personas que salen de la cueva, no quieren entrar de nuevo. Conocen la verdad, la realidad. Dentro solo hay oscuridad, frío y sombras. Fuera hay luz, calidez e imágenes claras.

No han estado muy lejos de la explicación original. La interpretación fue maravillosa. Surgieron muchas preguntas entorno a esta imagen y a este mito y su relación con la actualidad.

  • El mito de la caverna es como jugar al Minecraft. Tu puedes vivir en el juego y creértelo todo o puedes salir de él y vivir una vida real sin Zombies, ni brujas,…
  • El mito de la caverna es como la televisión. Tu puedes creerte todo lo que aparece en la televisión sin comprobar si lo que ocurre es verdad o mentira. Por ejemplo, que en la televisión digan que ha habido una invasión zombie. Tu puedes creérlo o no. Solo sabrás si es cierto si tú mismo sales a la calle a comprobarlo.
  • El mito de la caverna es como un cuadro. La persona que pinta ve la naturaleza y lo que hace es copiarla en el cuadro. El cuadro no es más real que la realidad.
  • El mito de la caverna es como una foto. Una foto enseña cómo es una persona o cómo es algo, pero no es la autentica realidad. Por ejemplo si en la foto se maquilla, no quiere decir que sea una persona real. La persona real es la que no se maquilla para la foto.

Pasamos a la siguiente parte del taller. Para ello trabajamos el mito de la caverna con una de las imágenes del Cuaderno visual de Filosofía para Niños de Wonderponder – Pellízcame.

Conclusiones tras ver la imagen:

  • A veces inventamos la realidad para parecer que sea todo mejor. Por ejemplo el rey, porque parece un rey, parece más bajito, más feo,… y, sin embargo, el pintor lo dibuja de una manera totalmente diferente para que parezca que tiene mucho poder.
  • Nosotros podemos decidir que consideramos verdad o no. El problema es cuando nuestros sentidos ven las cosas diferentes. -como cuando vemos espejismo en los días de calor y creemos ver agua en la carretera– A veces nuestros sentidos nos engañan, pero nuestra cabeza está entrenando para saber diferenciar la verdad de la mentira, la realidad de la ficción.
  • Mi cabeza sabe que el rey no pintado es más real que el del cuadro. Mi cabeza sabe diferenciar, pero mis sentidos no. Mis sentidos ven y oyen lo que ven y oyen. Pero es mi cabeza lo que lo interpreta. (¿puedes poner un ejemplo?) Por ejemplo, cuando yo juego al Minecraft, mis sentidos viven en el mundo de Minecraft, pero mi cabeza sabe que el mundo de Minecraft no es real, que solo es un juego.

Algunas conclusiones:

La realidad es cuando sentidos y cabeza se juntan. No todo lo que vemos es real. La cabeza es la que nos tiene que ayudar para saber diferenciar la realidad de la mentira. Pero, a veces, la cabeza está loca, y no sabe diferenciar lo real de lo no real. En ese caso, tenemos que preguntarnos qué vemos con más luz y más claro. Sentidos y cerebro son importantes para conocer.  (Martín 7 años)
Los sentidos nos engañan a veces, pero nos engañan más si no podemos hacer las cosas con libertad ni pensar con libertad. Como el pintor, que no es libre porque hace lo que le mandan. Es como los sentidos. Que a veces no podemos ver las cosas bien porque nos engañan y estamos bajo sus órdenes. (Xabier 9 años)
Me quedo con la idea de opinión y sombra, porque esto es lo que no nos permite ver las cosas claras. Necesitamos de la luz para conocer la verdad, no de la oscuridad y la sombra. (Mariella 9 años)
Nada. Esto no es nada. No podemos conocer nada. (Nora 6 años)