La vuelta al mundo en 80 días – FpN 3-6 años

La ecosofía se alza como una disciplina crucial para comprender y preservar la interconexión entre los seres humanos y el planeta que habitamos. Para comprender la ecosofía, empezamos trabajando el concepto de raíces. Estas raíces como vimos no se refieren solo a las conexiones familiares o culturales, sino también a nuestra conexión primigenia con la naturaleza. La ecosofía nos invita a reconocer nuestra dependencia fundamental de los ecosistemas y a reconectar con nuestras raíces ecológicas. Al profundizar en esta comprensión, desarrollamos una mayor conciencia ambiental y un sentido de responsabilidad hacia el planeta. Esta conexión con nuestras raíces nos lleva a apreciar la diversidad y la belleza de la naturaleza, inspirándonos a cuidarla y protegerla.

Continuaremos nuestro viaje hacia la obra literaria de Julio Verne, «La Vuelta al Mundo en 80 Días». En esta novela clásica, el protagonista, Phileas Fogg, se embarca en una audaz aventura para dar la vuelta al mundo en un plazo de 80 días. Aunque en un principio puede parecer ajena a la ecosofía, esta historia nos invita a reflexionar sobre la exploración y el descubrimiento de nuevos horizontes. En la travesía de Fogg, encontramos la representación de nuestra curiosidad innata por comprender y apreciar la diversidad.

¿Sería posible adaptarnos a vivir en cualquier lugar del mundo si diéramos la vuelta al mundo en 80 días? ¿Qué sucedería con los animales y las plantas en cada uno de esos entornos? Estas preguntas nos llevan a reflexionar sobre la capacidad de adaptación humana y la interdependencia entre los seres vivos y su hábitat.

  • Podríamos conocer la torre de Arabia Saudí.
  • Conoceríamos muchos océanos y mares, y veriamos muchos plástico en el agua.
  • Veríamos muchos animales y muchas personas.

¿Te has preguntado cómo se denomina el lugar donde los animales de una misma especie coexisten y encuentran todo lo necesario para su supervivencia? Este lugar se conoce como «hábitat». El hábitat se define como el entorno o tipo de lugar en el que vive un organismo. Cada hábitat se distingue de otros por las características específicas del medio ambiente y la vegetación predominante. Podemos encontrar una amplia variedad de hábitats en la naturaleza, como lagos, praderas o charcas, cada uno con sus propias particularidades y condiciones que proporcionan el sustento y refugio adecuados para diversas formas de vida.

Establecido el concepto de Hábitat, trabajamos a partir de unas cartillas una serie de hábitats y clasificamos las imágenes de algunos animales y plantas que van sacando los niños y niñas de un sobre. ¿Por qué los animales viven en diferentes hábitats? ¿Cómo se adaptan los animales a su hábitat? ¿Qué ocurre con las personas?

  • La ballena va en el mar, porque en una selva no podría vivir. Le falta comida y no tiene piernas. -Pero puede reptar como una serpiente, ¿no?- Pero la ballena no puede vivir en la selva porque necesita respirar del agua y es el sitio donde tiene que vivir.
  • El caballo en la granja. Porque en la granja tiene manzanas y zanahorias. En el boque no hay tanta comida como en una granja.
  • Las personas pueden vivir en cualquier lado, porque utiliza su imaginación para poder vivir en cualquier sitio (sabe adaptarse a las condiciones), porque piensa cómo puede vivir y después lo fabrica. Por eso hay que imaginarlo primero.

Algunas de la cuestiones que acompañaron al diálogo:

¿Por qué es importante proteger los hábitats naturales de los animales? ¿Qué podemos hacer para ayudar a los animales que viven en hábitats amenazados?

¿Qué pasaría si un animal fuera llevado a un hábitat diferente al que está acostumbrado? ¿Cómo afectaría esto al animal?

¿Cómo se comunican los animales en su hábitat? ¿Cómo se relacionan los animales en su hábitat?

¿Si tuvieras que elegir tu hábitat cómo sería?
Los niños trabajaron su hábitat ideal. Para ello debían en primer lugar dibujarlo y después pegar o dibujar los animales, plantas y personas que consideraban oportunas. Al mismo tiempo, se le va ayudando a los niños y niñas a identificar los elementos necesarios para el hábitat que han elegido, asegurarse de que los incluyan en su dibujo y cuestionarles el por qué de esa decisión.

Para finalizar, pedir a los niños que presenten sus hábitats y expliquen por qué eligieron ese hábitat y qué animales y plantas incluyeron en su dibujo. De esta manera se fomenta la discusión y la capacidad de sintetizar sobre lo trabajado en la sesión.

Plantilla utilizada

-Yo pongo a mi familia en mi hábitat porque es muy importante para que yo pueda crecer.

-Yo pongo el sol y muchas cosas en mi hábitat porque así todo puede crecer, además hay agua, para los peces, hay bosques,… todos los animales y personas pueden vivir en mi hábitat. Y los niños también, porque así pueden jugar entre ellos y ser felices.

Yo pongo el planeta. Porque todo el planeta es un hábitat. Si en el planeta no hay hábitat yo no puedo existir porque no habría agua ni árboles para poder vivir, y nadie me puede cuidar y yo no puedo vivir si nadie me cuida. Cuando sea mayor puedo cuidarme yo solo, pero ahora no puedo cuidarme solo. Por eso en mi hábitat tiene que ser todo el planeta.


¡Quiero la raíz!- FPN 3-6 años

La ecosofía es el camino que nos permite redescubrir y reconectar con el jardín del Edén perdido. Al explorarla, desenterramos las semillas de armonía y equilibrio que yacen en nuestro interior, cultivando así un paraíso terrenal donde florecen la naturaleza, la sabiduría y el respeto hacia todos los seres vivos.

Necesitamos la raíz para poder transformar nuestro jardín, nuestro mundo. De ahí que en esta primera sesión se trabaje el concepto de RAÍZ.

En esta primera sesión trabajamos con el libro ¡Quiero mi raíz! de Ángelica Sátiro.

Libro de Ángelica Sátiro

Antes de sumergirnos en la lectura del libro, planteémonos y reflexionemos sobre la razón por la cual el protagonista del libro anhela su raíz. Esta pregunta nos conduce a un cuestionamiento aún más profundo: ¿Qué representa realmente una raíz?

Una raíz es algo que necesitan las plantas para vivir. Si una planta no tiene raíz no puede vivir, estaría seca, no se podría alimentar de las cosas que tiene el suelo para que crezca. (Definición unánime)

Una vez establecida la idea de raíz nos introducimos en la lectura del libro. A medida que vamos leyendo van surgiendo cuestiones interesantes como:


¿Qué tipos de raíces conocemos? ¿Solo las plantas tienen raíces? ¿Pueden las personas tener raíces?

  • Las raíces solo son de las plantas. Sin ellas no pueden crecer y para que crezcan las plantas necesitan agua y sol.
  • El agua y sol son importantes para que crezca la planta, pero sin raíz no puede.
  • Solo las plantas pueden tener raíces. Porque la raíz es lo que hace algo crezca desde el suelo.
  • Las personas no pueden tener raíces porque no somos plantas.

A medida que exploramos estas preguntas, descubrimos algo sorprendente: LAS PERSONAS TAMBIÉN TENEMOS RAÍCES. Pero nuestras raíces no son como las de un árbol, son diferentes. Nuestras raíces hablan de nuestro origen, de nuestros antepasados. Cuando hablamos de raíces, hablamos de historia y herencia, y no solo las personas tienen historia y herencia, ¡todo lo que nos rodea también la tiene! Desde cosas inanimadas como una piedra hasta seres pequeñitos como un microorganismo.

Hablemos ahora sobre algo llamado «árbol genealógico». Un árbol genealógico nos muestra a nuestras familias y cómo estamos relacionados con nuestros padres, abuelos y más parientes. ¡Es como un mapa de nuestras raíces!

Ahora viene otra pregunta: ¿Cómo te hace sentir la idea de tener raíces como una planta? ¿Crees que nuestras raíces nos ayudan a ser quienes somos?

  • Me hace feliz, porque por la raíz yo también he podido nacer como una hoja. (cojo esta idea de nacimiento y verse como un ser que ha nacido gracias a la raíz, pido que explique esa metáfora). Pues que gracias a la raíz ha podido nacer toda mi familia, y todos somos hojas que han ido creciendo de diferentes ramas que al final es mi hoja que soy yo (5 años)
  • Me hace feliz porque todos estamos en el mismo árbol, y así nos queremos, aunque mi tatatatatatatataraabuela esta muerta

Como actividad de cierre, se les invita a los niños a utilizar el papel proporcionado para dibujar las cosas que consideren más importantes para que su «planta» crezca y se desarrolle saludablemente. Después de explicarles que una raíz es la parte de una planta que se encuentra debajo de la tierra y ayuda a la planta a crecer y obtener nutrientes, se les anima a dejar volar su creatividad y plasmar sus ideas en el dibujo.

Plantilla utilizada para la creación.

A medida que los niños van dibujando, se les hace preguntas para fomentar su reflexión y expresión de pensamientos, como: ¿Por qué crees que lo que has dibujado es importante para que la planta crezca? ¿Qué función cumple en el desarrollo saludable de la planta? ¿Cómo crees que ayuda a obtener los nutrientes necesarios?

De esta manera, se les anima a pensar en la importancia de diferentes elementos como el sol, el agua, el suelo fértil, el aire limpio, los insectos polinizadores, entre otros, y a reflexionar sobre cómo estos elementos son esenciales para el crecimiento y bienestar de una planta. Al mismo tiempo, se fomenta su capacidad de expresión y razonamiento sobre la interdependencia entre la naturaleza y el desarrollo saludable de las plantas.

Una vez finalizados los dibujos y como actividad de cierre, se les permite que compartan y comenten sus creaciones en grupo, destacando lo que consideran más importante de su planta.

  • Para mí, lo más importante es el agua, pero no mucha agua, solo la justa, para que no se ahogue y pueda crecer.
  • Para mí, lo más importante es el sol porque sin el sol no puede crecer la planta.
  • Para mí, es la tierra. Porque sin tierra no puede tener agua y tampoco sol.
  • Para mí, es todo. Mi planta necesita todo para que pueda crecer. No se puede decir solo una cosa. Eso no está bien para mi planta.
  • Para mí, la casa, porque la he pintado bonita y porque las personas también tienen raíces.

Damos por finalizada la sesión. Una sesión en la que se ha reflexionado sobre la importancia de las raíces para el crecimiento y desarrollo de las plantas, destacando que así como las plantas necesitan raíces fuertes para crecer sanas, nosotros también necesitamos tener raíces sólidas en nuestros valores y acciones para cuidar y proteger nuestro hogar, la Tierra.


Dos ejemplos de imágenes creadas:

El jardín del Edén – Ecosofía FPN 3-6 años

Hacia un mundo mejor.

Todos hemos soñado alguna vez con estar en un lugar perfecto, sin contaminación, con las aguas limpias y cristalinas, rodeados de naturaleza y tranquilidad, sin sirenas de ambulancias, cláxones de coches o zumbidos constantes del móvil.

En este taller, los niños y niñas trabajarán la importancia de la naturaleza que tiene en nuestras vidas, el respeto que todo ser vivo merece y una concepción del ser humano más humilde y consciente de nuestro papel en la gran cadena del mundo y de la responsabilidad que para la conservación del planeta tenemos. Se trata de acercar la Ecosofía a nuestros niños y niñas.

¿Qué es la ecosofía?

La palabra «ecosofía» combina dos raíces etimológicas: «eco-» y «-sofía».

El prefijo «eco-» proviene del término griego «oikos«, que significa «casa» o «hogar». Este prefijo se utiliza para hacer referencia a la relación entre los seres vivos y su entorno, destacando la interconexión y dependencia mutua.

El sufijo «-sofía» también proviene del griego y se traduce como «sabiduría» o «conocimiento». Es utilizado para denotar una disciplina o campo de estudio que busca comprender y profundizar en un área particular del conocimiento.

La ecosofía es una rama de la filosofía que nos ayuda a comprender cómo todo en la naturaleza está interconectado y cómo nuestras acciones afectan al medio ambiente. Nos enseña que la Tierra es como una gran casa que compartimos con muchos otros seres vivos, como animales, plantas y microorganismos, y que todos dependemos unos de otros para vivir. También nos habla de la importancia de la justicia social y de construir una sociedad más equitativa y sostenible. Nos anima a vivir en armonía con la naturaleza, a cuidar del medio ambiente, a construir una sociedad más justa y sostenible para proteger nuestro planeta y asegurar un futuro mejor para todos.

Incentivar el conocimiento sobre el medio ambiente a través de un pensamiento filosófico y crítico puede llegar a empoderar a las generaciones futuras para que tomen decisiones orientadas a la acción, conscientes de su capacidad para lograr un mundo mejor. Los niños y niñas tienen una gran empatía con la naturaleza, y conjugando emoción y conocimiento se les puede “encaminar” hacia la acción.

La ecosofía es el camino que nos permite redescubrir y reconectar con el jardín del Edén perdido. Al explorarla, desenterramos las semillas de armonía y equilibrio que yacen en nuestro interior, cultivando así un paraíso terrenal donde florecen la naturaleza, la sabiduría y el respeto hacia todos los seres vivos.

En este taller trabajaremos en 5 sesiones LA VISIÓN ECOLÓGICA. Cada sesión queda dividida de la siguiente manera:


Sesión 1: ¡Quiero la raíz!

Sesión 2: La vuelta al mundo en 80 días. 

Sesión 3: Verde que te quiero verde.

Sesión 4: El plástico se pregunta: ¿Soy reciclable o solo una bolsa de problemas filosóficos?

Sesión 5: El jardín del Edén.

Cosas de princesas. Los estereotipos en los cuentos (3-6 ños)


Seguimos con la dinámica del taller: <<Jugando con las palabras>>.

El diálogo empezó haciendo un pequeño resumen de las sesiones anteriores. Hablamos de la posibilidad de percibir olores y sensaciones sin necesidad de estar presente en un lugar tras ver la foto de una cabrito de 4 días.

Imagen propia

Esa foto huele a cabra. (¿A qué refieres con eso? ¿A caso podemos percibir el olor a través de una imagen?) Por supuesto. Depende de cómo sean los colores, las líneas, el espacio,… todo lo que está en la imagen hace que se pueda oler la imagen. (Solveig 5 años)

Es verdad, si vemos una caca en una imagen, sabemos que esa imagen va a oler mal. Porque la caca huele mal. No hace falta olerla en la verdad para saber que huele mal a caca (Clara 4’5 años)

-Pienso como ella. Porque en la imagen hay cosas que vemos y sabemos como son (Amaia 4’5 años)

La imagen, recordamos la sesión Las imágenes en palabras, la interpretamos y nos traslada a sensaciones a través de la memoria y el recuerdo. El pintura, la poesía, la escultura,… tiene esa cualidad.

Cosas de princesas, un cuento que ya fue trabajado con anterioridad hace unos años. (ver diálogo)

En esta sesión y en relación a la pasada fecha del 8 de marzo, día internacional de la mujer. Trabajamos a través del cuento la igualdad de género rompiendo los estereotipos de los cuentos y analizando aspectos del día a día.

Hemos crecido leyendo y escuchando cuentos infantiles totalmente estereotipados. Las escenas de los mundos de fantasía están cargadas de sexismo. Los perfiles físicos, emocionales, las actitudes o las actividades que cada personaje realiza están llenas de estereotipos sobre las mujeres y los hombres.


El lobo siempre es el malo, las débiles princesas siempre tienen que ser rescatadas por un príncipe valiente, la mujer siempre tiene actitudes pasivas en el entramado de la historia y realiza trabajos relacionados con los cuidados de la casa o de otras personas.


Esta actividad pretende mostrar al alumnado un cuento diferente en el que se muestra una princesa independiente y con las mismas capacidades que el príncipe.

Resultado de imagen de cosas de princesas de Jose Angel de la Banda
Portada «Cosas de princesas»

«Cosas de princesas» un texto de José Ángel de la Banda, con el que hemos trabajado para desarmar los estereotipos de género típicos de los cuentos infantiles.

Tras la lectura de la primera parte del cuento, en la que el príncipe va a salvar a la princesa, pero que no sabemos qué pasará después. comienza el diálogo:

  • ¿Cómo creis que va a continuar al historia?
    • El príncipe luchará con el dragón, y lo lanzará por la ventana. El dragón muere y la princesa y el príncipe se hacen amigos y juegan juntos.
    • La princesa está luchando contra el dragón. Porque tiene valor. El cuento dice que la princesa es valiente. Entonces tira al dragón por la ventana y se muere.
    • No pasa nada, porque no hay nadie. Todo ha desaparecido.

  • ¿Qué historias cuentan los libros de princesas? ¿Cuántos libros conocéis? ¿Qué ocurre en esos libros? ¿Cómo son los libros de princesas?
Los libros son raros. La princesa nunca tiene valor. Hay que tener valor para que nadie te rescate y te puedas rescatar tú sola. Si una persona no tiene valor, no puede ser feliz. (Solveig 5 años).
Siempre se rescata a una princesa, pero yo tengo libros que no. A veces, las princesas no necesitan ser salvadas porque también son valientes, ingeniosas y fuertes. (Clara 4'5 años)
Las princesas, como Rapunzel que tiene el pelo muy largo, tienen que ser salvadas. Las princesas no necesitan ser salvadas, solo necesitan ser escuchadas. (Amaia 4'5 años)

Hablamos sobre el concepto de valor, su significado y utilizamos «ser valiente» para entender el concepto de valor. Poniendo ejemplos del día a día.

Anécdota graciosa:
«Rapunzel, no puede ser valiente. Porque yo soy valiente cuando voy sola en la bici y no tengo miedo a caerme. Pero Rapunzel, se caería con el pelo tan largo y no puede ser valiente porque tendría miedo a caerse por el pelo» (empieza una pequeña discusión sobre ir en bici y tener el pelo largo, una discusión de lo más divertida).

  • ¿Crees que las princesas pueden hacer las mismas cosas que los príncipes?
    • Claro, las princesas son como los príncipes y los príncipes como las princesas. No sé porque siempre dicen que no. Creo que las personas que dicen que no es porque no ven a la otra persona como persona. Quizás la ven como otra cosa que no es persona.
    • Pero a veces, las princesas no pueden hacer algo y necesitan ayuda. Las princesas son como los príncipes, son iguales. Solo tienen que ayudarse cuando uno de los no puede hacer algo y necesita ayuda. Entonces no son iguales porque no pueden hacer la misma cosas. Como cuando mi papá ayuda a mi mamá o mi mamá a mi papá.
A ver, aquí hay un tema interesante. Y es que, tanto en princesa como en príncipe, los dos son personas, y solo, por ser personas, aunque no sean reales, que son de los cuentos, deben ser iguales. Todas la personas somos iguales. La desigualdad solo es cuando, como ha dicho ella (hace referencia a Clara), una persona no sabe hacer algo y necesita la ayuda de otra persona. Pero no por ser princesa o príncipe, o tener la piel azul (color de la piel del príncipe del cuento) o marrón, o ser ciego o no saber hablar,.. tiene que haber una desigualdad. Pero la desigualdad se arregla cuando la persona que está ayudando enseña a la que no sabe para que aprenda. Y cuando ha aprendido, desaparece la desigualdad y aparece la igualdad (Martín 8 años)

Tras un interesante diálogo entre la igualdad y poniendo ejemplos de aspectos del día a día, hacen un dibujo sobre cómo se imagen los personajes (se me olvidó hacer foto a los dibujos). Pasamos a la segunda parte de la historia.

Conclusión final:

La princesa no necesita ser salvada, no corre peligro. 
Hay que pensar antes de actuar. 
Se puede ser enorme, gordo y peludo y ser bueno, no tiene porque ser malo. 

El cuento con el que se ha trabajado ha sido descargado de SED

Construyamos un cuento (3-6 años)

Seguimos con la dinámica del taller «Jugando con las palabras».

Antes de empezar la sesión es necesario hacer una recapitulación de lo que hemos trabajado hasta el momento. Es importante que los niños y niñas sigan la dinámica para que el objetivo último: La expresión y el valor de las palabras quede optimizado. De ahí que se le pida a los niños y niñas, con el material ya utilizado, hacer un resumen a esos compañeros/as que no han podido asistir a algunas de las sesiones.

En esta recapitulación volvemos a recuperar la definición de Palabra y su utilidad como ya vimos en: «: El mundo de las palabras. Los nombres de las cosas o las cosas y sus nombres«

  • Las palabras sirven para hablar y decir las cosas de nuestro pensamiento.
  • Las palabras no las podemos ver, pero sí las cosas.
  • Hay palabras que son iguales pero significan diferente
  • Son importantes para comunicarnos

El hecho de que sean importantes para comunicarnos, no quiere decir que sea la única vía de comunicación, porque como ya vimos en «Las imágenes en palabras. La palabra muda.» Se puede comunicar sin decir palabra.

  • Claro un semáforo rojo dice que tienes que parar. Es una imagen.
  • Esta cara está contenta pero no pone la palabra contenta
  • Está está loca, y no pone que está loca.

Una vez hecha la recapitulación y explicado sobre el tema del taller. Nos introducimos en la 3ª sesión del taller: «Construyamos un cuento».

Surge la primera cuestión: ¿Os he contado alguna vez el cuento del niño chino?
Nunca han escuchado el cuento del niño chino. Pero, espera, antes de hablar del cuento, necesitamos saber qué es un cuento. Estás son las cuestiones que nos invitaran a reflexionar y dialogar sobre el cuento.

Sobre estas preguntas: Cuando alguien dice sí, debe dar razones sobre esa respuesta, se le puede ayudar con ejemplo o con la participación de otros compañeros. Cuando alguien dice no, deberá pensar o crear un cuento que no tenga lo que se le pregunta.

l. ¿Tiene un cuento que tener un principio?

  • Sí, porque sino no sabemos cómo empieza la historia.
  • Sí, pero que no empiece por «Érase una vez…» que es muy pesado.
  • No, hay cuentos que empiezan sin tener principio. No sé cual. Por ejemplo: (ayudamos entre todos, cuesta mucho empezarlo) «La chica se fue con sus papas de viaje a casa de su tío a España» (en este cuento no decimos qué chica es, ni dónde vive, no se da información previa sobre ella)

2. ¿Es necesario que un cuento tenga un final?

  • Sí, porque sino no sabemos cuando acaba. Todos los cuentos tienen que tener un final.
  • No, pueden haber cuentos sin un final. Para que la niña o el niño piense sobre el final que quiera.

3. ¿Tiene un cuento que ser verdadero?

  • Por supuesto que no. Yo odio los unicornios, y los cuentos de unicornio no son verdaderos porque los unicornios no existen.
  • No, son verdaderos porque los animales no pueden hablar y en los cuentos hablan.

4. ¿Puede un cuento ser sobre animales?

  • Sí, por ejemplo los tres cerditos
  • Grufallo, también salen animales.
  • Sí, un cuento puede ser por cualquier cosa.

5. ¿Es posible que un cuento trate de cosas que no están vivas?

  • Por supuesto, es como antes. Los unicornios. Odio los unicornios, no me gustan, están muertos, bueno, no existen y hay muchos cuentos sobre unicornios.

6. ¿Puede haber un cuento sin palabras?

  • Sí, en la la otra clase se contó un cuento con imágenes.
  • Mi cuento de Grufallo no tiene palabras.
  • Yo también tengo cuentos sin palabras

7. ¿Puede haber un cuento sin pensamientos?

  • Eso es imposible, un cuento tiene que salir de la cabeza.
  • Claro, un cuento está primero en el pensamiento y después se escribe o se dibuja.

Después de todas las preguntas y las respuestas, lanzamos la última pregunta. ¿Qué convierte a un cuento en un cuento?

  • Pues que tiene que ser pensado.
  • Que puede tener imágenes o palabras.
  • Tiene que tener un principio, porque sino cuesta mucho de empezar.
  • Puede no tener final.
Imagen de Fantasía, Sueño y Astronauta. De uso gratuito. Licencia de Pixabay

Después de la parte «teórica» tocó llevar a la práctica lo que habían estando respondiendo. Y, por supuesto, contar el cuento de «El niño chino»

Para esta actividad, cada uno de los niños debían elegir un único objeto de la clase. A la hora de seleccionar el objeto debían preguntarse por qué ese objeto y no otro. Ese objeto era importarte para contar el cuento del niño chino. Una vez con el objeto en la mano y vuelto cada uno/a a su sitio. Cada uno de los niños y niñas deben introducir su objeto en el cuento, al mismo tiempo que siguen la historia. El cuento tiene que tener un principio, un nudo y un final. Ellos y ellas solo saben que tienen que ese objeto es necesario para meterlo en la historia, no que van a construir el cuento.

Comenzamos el cuento de «El niño chino», pero… ¿Cómo empieza el cuento? ¡NO ME ACUERDO!

¡CONSTRUYAMOS EL CUENTO!

Así quedó el cuento de «El niños chino»:

Hola me llamo el niño chino y me gusta jugar a la peonza, pero poniendo la tortuga de navidad encima, para que de vueltas, y vueltas, y vueltas, y vueltas, y vueltas, y vueltas,... así hasta 10 veces. 
Y cuando me aburro juego con el juguete del martillo, para golpear unas "eses". Y también me gusta jugar con las flores para construir. Por ejemplo, puedo construir un avión para volar a China, porque en China hay animales, chihuahuas, un tren, un mura grande,... también puedo construir un baño, una casa, un botón,...
Un día mientras con las piezas de flores construía un chihuahua. El perro quería ser de verdad y quería pasear y él se perdió. El niño chino no sabía que el chihuahua se había subido a la peonza y se había puesto a dar vueltas, y vueltas, y vueltas, y vueltas,... hasta que salió volando hasta Alemania. Donde se encontró con una peonza. Pero lo gracioso era que era la misma peonza con la que voló a Alemania, ¿Qué curioso no? ¿Cómo pudo ser?. 
De todas formas, el chihuahua ya no quiso volver. Allí dijo adiós directamente y este cuento del niño chino se ha acabado. 
¡FIN!

¿Os cuento el cuento de «El niño chino»?

  • (Por unanimidad. Leo el cuento)

¿Qué os ha parecido el cuento de «el niño chino»? ¿Cómo se ha creado el cuento?

  • Pues con nuestro pensamiento
  • Con nuestras palabras
  • Con nuestros objetos.

¿Qué se necesita para que un cuento sea cuento?

  • Tener pensamiento
  • Objetos que nos ayuden a pensar
  • Nada

Finalizamos la sesión como siempre: ¿Con qué os quedáis de la sesión de hoy?

  • Con el cuento del «El niño chino»
  • Con el final: «Adiós».
  • Con todo
  • Con los dados

Esta actividad fue seleccionada del «Manual para acompañar Hospital de Muñecas- Entendiendo mi mundo» de A. Sharp y L. Splitter. Capítulo 3 Idea Principal 7: ¿Qué es un cuento?

Las imágenes en palabras. La palabra muda (3-6 años)

Las palabras son un signo lingüístico que sirve para comunicarnos. A partir de los 3 años, los niños y las niñas se convierten en grandes preguntones. El mundo que les rodea es inmeso y, por eso, sienten la necesidad de ampliar su vocabulario para conocerlo mejor. De esta manera a sus qué, por qué, cómo, dónde, quién se añaden una de las palabras de su vocabulario para ampliar.

En esta sesión «Las imágenes en palabras. La palabra muda» de Jugando con las palabras. Los niños y las niñas reflexionaron y dialogaron sobre la importancia del objeto o las cosas para ponerle un contexto y una palabra o concepto. Se trabajaron las palabras a partir de imágenes y cómics (sin rellenar), estos materiales recuerdan al cine mudo. En ninguna de estas vías hay palabras y, por supuesto, tampoco música. Solo por lo que percibes a través de la imagen puedes pensar en la historia, o los conceptos. Aprendemos de esta manera a leer y conocer solo a través de la imagen.

Para introducirnos en este tema, lanzamos una cuestión:

¿Existen las palabras? ¿Dónde existen las palabras?

Las palabras solo existen en mi pensamiento. No las vemos como vemos una silla. La silla no es la palabra silla. Las palabras no las podemos ver, las cosas sí

Clara 5 años
  • Las palabras existen, pero no todo tiene una palabra.
  • Las palabras son todas las cosas. Todas las cosas existen porque tienen palabras.
  • Pero, una persona que no ve nada, conoce las cosas sin verlas. Conoce las palabras sin ver las cosas.
  • Claro, una persona que no sabe hablar, por ejemplo un bebé o mi hermano o una persona que no sabe hablar (muda). Pues puede ver las cosas pero no saber la palabra.

(en menudo follón nos hemos metido en este momento, pero conseguimos salir de él)

Las palabras tienen siempre una representación según la deducción que han hecho. Pero, aquí el primer problema. ¿Qué sucede cuando algo tiene una palabra pero no tiene una representación física como una silla, o una luna, o una puerta? Utilizamos como ejemplo el silencio.

¿Cómo puedes representar el silencio? Dibújalo

(después de un rato sin dibujar nada)

El silencio representado como un papel en blanco. Sin sonido, ni ruido. nada.

Si hemos dicho que todas las palabras tienen una representación. El silencio también se puede representar, ¿no?

  • Pues no, porque el silencio es nada.
  • Bueno, el silencio es como ir a la playa y solo haya olas, sin pájaros y sin niños que molesten.
  • El silencio es… silencio.

¿Y el amor? ¿Nosotros vemos el amor?

El amor se representa con un corazón, porque sin corazón…¿No podemos vivir? (Marlon)
  • La palabra no, porque las palabras no se ven.
  • Sí, lo vemos cuando nos dan un abrazo.
  • Cuando mi Papá me cuida cuando estoy malita.
  • Además el amor se puede representar

A continuación algunas de las imágenes a las que los niños y niñas tendrán que poner palabras/historia/sucesos y darán lugar al diálogo:

¿Qué sucede en esta imagen?

  • El hombre está buscando algo
  • Claro, está buscando palabras.
  • ¿Puede haber libros sin palabras y sin nada? Si no hay palabras no puede haber una historia.
  • El hombre tiene gafas para ver si así ve mejor las palabras, pero no sabe que no hay palabras, y no las va a ver. Porque las palabras no se pueden ver, pero sí las cosas. (aquí vemos como ha cogido algunas de las ideas del diálogo anterior)

Niños jugando en la playa. Mary Cassat

¿Qué palabra le pondríais a esta imagen? Solo una

  • No sé
  • Jugar
  • Divertido
  • Cubo
  • Niñas

¿Podrías contar o decir algo de esta imagen?

  • Dos niñas juegan en la playa y están tristes porque sus papás han dicho que ya se tienen que ir porque mañana hay KITA
  • Dos niñas juegan en la playa, y una niña está triste porque no tiene sombrero.

Describimos la imagen y formamos la siguiente historia.

«Una niña se despierta por la mañana con los pelos locos. Coge un peine y se pone a peinarse. Después de 100 horas peinándose se pone guapa. Pero por culpa de peinarse ha llegado tarde a la KITA.«

  • Por eso es mejor no peinarse.

Cierre:

Después de una sesión increíble, en la que hemos aprendido sobre la posibilidad de conocer sin palabras, jugado a un juego de mímica como forma de expresión y deducir que para poder comunicar y conocer el mundo, no solo existen las palabras, sino que también las imágenes- representaciones y las expresiones. Y la pregunta final: ¿Con qué os quedáis de esta sesión?

  • Con la chica que al final no ha ido a la KITA porque ha tardado mucho tiempo en peinarse.
  • No sé. (Pero no sé no se acepta como respuesta en este momento) Con ponerle nombres a las caras y hacer la cara loca.
  • Con el hombre que busca palabras cuando es un libro sin palabras. ¿Cómo va a buscar algo que no existe?

Imagen: «Niños jugando en la playa» de Mary Cassat. Extraida de ArteHistoria

El mundo de las palabras. Los nombres de las cosas o las cosas y sus nombres

El lenguaje es un instrumento humano y un vehículo al servicio de la comunicación, del conocimiento y de las relaciones sociales. Trata una ordenación abstracta del mundo producida por la comunidad, pero que se actualiza en el discurso individual. De ahí que cumpla una función simbolizadora que construye un mundo de objetos o de significados que actualizamos en nuestros discursos. Nos relacionamos con la realidad a través del lenguaje, << una forma de vida>> como diría el filósofo L. Wittgenstein. Con ello quiere decir que tiene en su base una cultura.

Las palabras, dentro de ese lenguaje no son meros recipientes prefabricados para archivar en ellas ideas. El mismo pensar ya es lingüístico, dinámico e interpretativo.

Lenguaje, conceptos y palabras se desarrollan desde la edad temprana. Ese momento en que los niños y niñas sienten una creciente interés por los objetos y las acciones a ejecutar. Se crea el periodo sensitivo del desarrollo del lenguaje, creando las bases para el aprendizaje significativo de las palabras, su relación con los objetos que se les presentan y con los fenómenos del mundo que les rodea.


Algunas de las cuestiones con las que se trabajó la sesión

¿Qué es el lenguaje?

  • Es eso que sirve para hablar con otras personas.
  • También sirve para hablar con lo que está dentro de la cabeza. ¿A qué te refieres? Yo a veces hablo con mi cabeza. ¿Entonces quieres decir que el lenguaje es la conversación o diálogo que mantienes contigo misma dentro de tu cabeza? ¿Puedes poner un ejemplo para que lo entendamos todos? Sí. Por ejemplo, yo puedo pensar quiero comerme un helado, pero como me acabo de lavar los dientes no puedo. Entonces eso que acabo de decir lo digo en mi cabeza.

¿El lenguaje solo es hablar? ¿Podemos comunicarnos sin hablar?

  • Claro, por ejemplo los semáforos. Los semáforos no hablan pero nos dicen que si está la luz roja no podemos pasar, porque puede pasar un coche.
  • Y los animales. Los animales no hablan, pero hay personas que saben lo que quieren.

¿Qué son las palabras?

  • Las palabras son las cosas que decimos.
  • También son las cosas sin decirlas. ¿A qué te refieres con eso? Que son las cosas que tienen nombre sin decir el nombre. Eso es una silla pero yo sé que es una silla sin decir que es una silla. Entonces eso es la palabra.
  • Sin palabras no podemos conocer.

Pero, ¿qué pasa cuando una palabra representa dos cosas diferentes? ¿Cómo podemos conocer algo que suena igual pero tiene diferente significado? ¿Y algo que tienen mismo significado pero se pronuncia diferente debido al idioma?(trabajamos el problema de la polisemia y el bilingüismo)

Trabajamos con estas dos imágenes:
Banco= die Bank
Banco= der Fischzug
  • Las dos son unos bancos. Pero uno son muchos peces y otro es para sentarse.
  • Solo podemos saber a qué te refieres cuando dices una frase de ellas. Como lo que has dicho o, por ejemplo, «fui al aquarium y vi un banco de peces» o «estoy muy cansada, voy a sentarme en el banco». Solo así sabemos la diferencia.

Trabajamos el tema de la generalización de las palabras con imágenes de diferentes árboles. Piensan en un oso y describen el oso, después deben decir si el oso que han pensado es el mismo que el de la imagen. Al no ser el mismo oso, ni ser el mismo árbol, pero aun así se le llama oso y árbol, hace que nos preguntemos sobre la hiperonimia, es decir, una palabra que engloba a muchas otras, por ejemplo, en este caso «Árbol» es el hiperónimo de «manzano», «peral», «roble»,….

Para trabajar el bilingüismo, la polisemia, los conceptos y el lenguaje. Se propone las siguientes actividades que darán lugar a la finalización de la sesión.

Nombrar: 
Había una vez una niña llamada Paula. a Paula le gustaba poner nombre 
a las cosas. 
Llamó a su perro Sal y a su gato azúcar. 
Llamó a la casa en que vivía Hogar. 
Después de un rato se quedó sin cosas a las que poner nombre. En vista de lo cual llamó a su cabeza Isabel, a sus manos Zurdita y Diestrita, y a sus pies abbott y Costello. 
Cuando se quedó sin partes del cuerpo a las que poner nombres, se preguntó a que más le podría poner nombre. 
«Ya sé, me queda mi nombre, Paula» se dijo a sí misma. 
«Paula es mi nombre pero, ¿cuál es el nombre de Paula? Lo que quiero decir es que cuál es el nombre de mi nombre» 

¿Qué nombre crees que le dio Paula a su nombre, y por qué?
Inventemos una lengua 
Tus alumnos están visitando otro planeta cuyos habitantes tiene la extraña costumbre de inventar una lengua nueva todos los días. Para imaginar cómo es esto, escribe en la pizarra algunas de las palabras más importantes y comunes que los niños conozcan (no demasiadas). Elige palabras como amigo, comer, jugar, casa, grande, cuento, dormir, o hermana. 
Ahora invita a los niños a hablar al resto de la clase sobre alguna de estas palabras, usando palabras inventadas en vez de las reales. 

Por ejemplo: Tengo un pitifu (amigo) que se llama Roberto. Cuando voy a su blup (casa) siempre me invita a nirati (comer) ... 

El objetivo de este juego, aparte de simplemente divertirse con el lenguaje, es averiguar cuánto podemos entendemos entre nosotros cuando 
hablamos una lengua que hemos inventado.
Ejercio extraido de: "Manual Hospital de muñecas" ed. La torre

Se cierra la sesión concluyendo que:

Las palabras son importantes para conocer las cosas que nos rodean, pero tenemos que saber en qué cosas se usan y de qué manera para poder referirnos a algo. Sin palabras no hay lenguaje, y el lenguaje es necesario para poder configurar nuestra experiencia en el mundo. 

Y dejamos una interrogación abierta para tratar en la próxima sesión

Pero, ¿qué pasa con aquello que tiene palabra pero no tiene imagen o cosa? ¿Cómo la conocemos?

Jugando con las palabras. Taller

Jugar proviene del latín iocāri ‘hacer algo con alegría’. A su vez proviene de iocus ‘broma’

Palabra del latín parabola tomada del griego antiguo παραβολή (parabolḗ) ‘comparación, alegoría’


Las palabras expresan ideas. Alguien puede escribir una palabra en un trozo de papel y después destruir el papel o borrar la palabra. Pero eso no significa que haya destruido la palabra. Solo se ha destruido la versión impresa de la palabra, los pequeños símbolos negros que estaban en el trozo de papel.

Las palabras son las porciones significativas más pequeñas de lenguaje. Combinamos letras para formar palabras pero las letras no tienen, en sí mismas, significado (excepto aquellas letras como, por ejemplo, «y» y «o», que actúan como palabras). Cuando combinamos palabras formarnos frases. Puesto que cada palabra tiene un significado, o un conjunto de significados, cuando formamos frases, seleccionamos las palabras que expresan el sentido que queremos expresar.

Por lo general, nunca pensarnos en este proceso. Nos limitamos a hablar o escribir frases, comunicando lo que queremos decir. Pero de vez en cuando decimos algo que no queremos decir, y esto nos da la oportunidad de volver atrás y repensar las palabras que hemos usado y cómo las hemos puesto juntas. A menudo nos damos cuenta de que hemos elegido la palabra equivocada o de que hemos unido las palabras de una forma que no comunica lo que pensamos. Cuando aprendemos a escribir, tenemos otra oportunidad más para transmitir lo que queremos decir y para expresarlo de una forma más clara.

Las palabras no tienen por qué decirse en voz alta. Se pueden decir silenciosamente para nosotros mismos. Este es un tipo de pensamiento, aunque puede no ser el único. Algunos niños son grandes pensadores verbales, mientras que otros prefieren pensar a través de dibujos o imágenes. Con frecuencia los niños se sienten fascinados por las palabras. También puede ser fascinante escuchar a una persona hablar en una lengua que no es la nuestra.

Los niños que crecen en hogares o comunidades bilingües tienen la maravillosa oportunidad de aprender a expresarse en más de una lengua, mientras que al mismo tiempo desarrollan la habilidad de traducir de una lengua a otra. El hecho de que dos palabras que suenan diferentes puedan referirse al mismo concepto puede ser muy impresionante para un niño pequeño.

Una comunidad de investigación permite a los niños aprender los diferentes estilos de pensar prestando especial atención a las formas en que piensan sus amigos.

Sesión 1: El mundo de las palabras. Los nombres de las cosas o las cosas y sus nombres.

Sesión 2: Las imágenes en palabras. La palabra muda.

Sesión 3: Construyamos un cuento.

Sesión 4: Leamos poemas. Interpretamos.

Sesión 5: Yo soy el cuento.

Sesión 6: El juego de las palabras.

Puedes descargarte el cuadernillo que se seguirán en las sesiones aquí:

Referencias bibliográficas:

Marqués Redolá, C, Marina, J.A ,García Moriyón F., Valores sociales y cívicos: 1º primara, Ed. SM

Marqués Redolá, C, Marina, J.A ,García Moriyón F., Valores sociales y cívicos: 2º primaria, Ed. SM

Marqués Redolá, C, Marina, J.A ,García Moriyón F., Valores sociales y cívicos: 3º primaria, Ed. SM

Sharp, A.H, Splitter, L.J. Manual para acompañar hospital de muñecas, Ed. La torre, Coord. García Moriyón, F.

Nomen, J El niño filósofo. Ed. Arpa

Ruiz, J.C El arte de pensar para niños. Ed. El toro mítico

Entre la sombra y la luz (Grupo 7-10 años)

Seguimos cuestionándonos la realidad al estilo Cartesiano. En primer lugar, se dudó de los conocimientos que nos aportan la Escuela y la Escuela misma (¿Para qué sirve la Escuela?), dudando así de los conocimientos que esta nos aporta y su utilidad. Después, dudamos sobre el estado onírico y la conciencia (¿Y si la vida es sueño?). Dudamos hasta de la propia vida (Pensamos la muerte). Para llegar a esta sesión: dudar de lo que percibimos a través de los sentidos.

El tema fue introducido preguntándonos por el mito. ¿Qué es un mito? ¿Conocéis algún mito? ¿Por qué se utilizan los mitos para explicar hechos de la realidad? (Se llevan a casa para leer una selección de mitos breves para leer y relacionarlo con la realidad y las explicaciones racionales)

– Un mito es como una historia que no es real.
– Es real cuando se cuenta, pero no se puede relacionar con la realidad. Por ejemplo el mito se explica para contar cosas que se desconocen.

– Claro, con el mito se resuelven las cosas que la ciencia no sabe, ¿no?
– En la actualidad no hay mitos porque sabemos muchas cosas y la ciencia y la tecnología, como Alexa, saben responder a las cosas que no sabemos.

El mito se utiliza para explicar de manera alegórica ciertos hechos, porque de esta manera se puede comunicar lo incomunicable como hace Platón, Filósofo griego (427-347 a.C). Introducimos el Mito de la Caverna.

A partir de la imagen, los niños y niñas deben ir interpretando el mito, sin previa explicación, deben ir dando ideas sobre lo que ven. Se van tapando cada una de las partes de la imagen, cuando está hecha la explicación pasamos a la siguiente parte. Así queda:

Imagen utilizada


1º Vemos unas personas sentadas viendo un jarrón, un pato y un árbol. Están apoyados en muro para que no les duela la espalda.

2º Vemos a una personas que están sujetando unos objetos. Los objetos son los mismos que aparecen en la pared. Son como las sombras de esos objetos.

3º El fuego, es lo que da la luz para que las imágenes puedan aparecer en la pared del fondo. El fuego es una luz artificial creada por las personas. Necesitamos el fuego para ver, porque nos da luz. También para estar calientes. Ahí dentro, no llega del todo la luz, los que están sentados no tienen calor, pasan frío porque están en la oscuridad. Tampoco pueden ver la luz del fuego.

4º Unas personas están intentando salir del lugar. Les parece aburrido lo que están viendo en el fondo y deciden irse. El primero de todos, como estaban en la oscuridad, se pone la mano en la cara para ver mejor. Como cuando estamos dormidos y se enciende de repente la luz. Nos hace daño la luz de golpe. Nuestros ojos deben adaptarse a la luz y a la oscuridad, por una cosa de la retina.

5. Están los mismos objetos que en la cueva. Pero esos objetos son más reales, no son creados por las personas, a no ser que el árbol si que haya sido plantado por un persona o se haya modificado el ADN de la semilla y la haya creado el hombre.

6. Las personas pueden ver las cosas mejor, porque hay más luz. El sol es una luz natural no creada ni inventada. Ilumina más que el fuego. Entonces, se puede ver el exterior mucho mejor.

7. Las personas que salen de la cueva, no quieren entrar de nuevo. Conocen la verdad, la realidad. Dentro solo hay oscuridad, frío y sombras. Fuera hay luz, calidez e imágenes claras.

No han estado muy lejos de la explicación original. La interpretación fue maravillosa. Surgieron muchas preguntas entorno a esta imagen y a este mito y su relación con la actualidad.

  • El mito de la caverna es como jugar al Minecraft. Tu puedes vivir en el juego y creértelo todo o puedes salir de él y vivir una vida real sin Zombies, ni brujas,…
  • El mito de la caverna es como la televisión. Tu puedes creerte todo lo que aparece en la televisión sin comprobar si lo que ocurre es verdad o mentira. Por ejemplo, que en la televisión digan que ha habido una invasión zombie. Tu puedes creérlo o no. Solo sabrás si es cierto si tú mismo sales a la calle a comprobarlo.
  • El mito de la caverna es como un cuadro. La persona que pinta ve la naturaleza y lo que hace es copiarla en el cuadro. El cuadro no es más real que la realidad.
  • El mito de la caverna es como una foto. Una foto enseña cómo es una persona o cómo es algo, pero no es la autentica realidad. Por ejemplo si en la foto se maquilla, no quiere decir que sea una persona real. La persona real es la que no se maquilla para la foto.

Pasamos a la siguiente parte del taller. Para ello trabajamos el mito de la caverna con una de las imágenes del Cuaderno visual de Filosofía para Niños de Wonderponder – Pellízcame.

Conclusiones tras ver la imagen:

  • A veces inventamos la realidad para parecer que sea todo mejor. Por ejemplo el rey, porque parece un rey, parece más bajito, más feo,… y, sin embargo, el pintor lo dibuja de una manera totalmente diferente para que parezca que tiene mucho poder.
  • Nosotros podemos decidir que consideramos verdad o no. El problema es cuando nuestros sentidos ven las cosas diferentes. -como cuando vemos espejismo en los días de calor y creemos ver agua en la carretera– A veces nuestros sentidos nos engañan, pero nuestra cabeza está entrenando para saber diferenciar la verdad de la mentira, la realidad de la ficción.
  • Mi cabeza sabe que el rey no pintado es más real que el del cuadro. Mi cabeza sabe diferenciar, pero mis sentidos no. Mis sentidos ven y oyen lo que ven y oyen. Pero es mi cabeza lo que lo interpreta. (¿puedes poner un ejemplo?) Por ejemplo, cuando yo juego al Minecraft, mis sentidos viven en el mundo de Minecraft, pero mi cabeza sabe que el mundo de Minecraft no es real, que solo es un juego.

Algunas conclusiones:

La realidad es cuando sentidos y cabeza se juntan. No todo lo que vemos es real. La cabeza es la que nos tiene que ayudar para saber diferenciar la realidad de la mentira. Pero, a veces, la cabeza está loca, y no sabe diferenciar lo real de lo no real. En ese caso, tenemos que preguntarnos qué vemos con más luz y más claro. Sentidos y cerebro son importantes para conocer.  (Martín 7 años)
Los sentidos nos engañan a veces, pero nos engañan más si no podemos hacer las cosas con libertad ni pensar con libertad. Como el pintor, que no es libre porque hace lo que le mandan. Es como los sentidos. Que a veces no podemos ver las cosas bien porque nos engañan y estamos bajo sus órdenes. (Xabier 9 años)
Me quedo con la idea de opinión y sombra, porque esto es lo que no nos permite ver las cosas claras. Necesitamos de la luz para conocer la verdad, no de la oscuridad y la sombra. (Mariella 9 años)
Nada. Esto no es nada. No podemos conocer nada. (Nora 6 años)

Pensamos la muerte -Grupo 3-6 años y 7-10 años

La muerte está presente en el mundo que nos rodea. La vemos en las series, el cine, en los juegos, en la propia vida como experiencia, por ejemplo, cuando se nos muere un familiar cercano o nuestra mascota.

Todas las personas hemos presenciado alguna escena donde la muerte se ha pronunciado. La muerte nos agobia, se nos presenta como un gran mal alejada de la vida cotidiana, por eso, la muerte no es tratada, la muerte se muestra como un tema tabú, como algo que no sucede y que esperamos que no suceda.

Desde edad temprana las cuestiones por la propia existencia son fundamentales. Los niños y niñas se cuestionan quién soy y por qué estoy. Buscan su lugar en el mundo, un mundo complejo lleno de trabas cuyo final es el desaparecer para caer en el recuerdo.

En esta sesión especial, en relación al Día de todos los muertos, se trató en los dos grupos de Filosofía para Niños y Niñas el tema de la muerte y la existencia, con el objetivo de ofrecer una aproximación al concepto de la muerte desde una perspectiva filosófica.

Para introducirnos en el tema, se recomendó algunos cortometrajes, la película de «Coco» y conocer acerca de la historia de Halloween. (Enlaces al final del post).

A continuación algunas de las preguntas que se trataron en los grupos:

¿Qué es la muerte? (Grupo 3-6 años)

  • La muerte es que te coman los mosquitos y que solo quede el esqueleto.
  • Es dejar de respirar y de sentir.
La muerte es dejar de vivir, para ser recordado. 

¿Cómo te imaginas la muerte? (Grupo 7-10 años)

  • Me la imagino oscura, sin luz. No solo porque morimos y tenemos los ojos cerrados, sino porque ya no podemos ver. No podemos ver el mundo que nos rodea.
  • No me la puedo imaginar, es algo que supera mi imaginación. No puedo imaginarla triste, porque si muero no puedo estar triste, pero tampoco contenta. Pero sí que me puedo imaginar la tristeza de mis familiares.
  • Me imagino el silencio y la oscuridad.

¿Qué pasaría si la muerte no existiera? ¿Os gustaría ser inmortales o no morir jamás? (Grupo 3-6 años)

En esta cuestión casi todos fueron al grupo de los inmortales menos una niña, que se quedó en la parte de los mortales, en los que prefieren morir.

  • Ser inmortal es mejor, porque puedes jugar todo el rato, ver la tele,…
  • No, no es mejor. Al final te cansas de siempre lo mismo. Es mejor ser mortal.
  • Si somos inmortales… ¿Somos solo nosotros inmortales o también nuestra familia? (solo nosotros, dice uno niño) Entonces no quiero ser inmortal, no quiero ver a todos morir para quedarme solo.

Empiezan a cambiar de opinión, solo dos prefieren ser ahora inmortales.

  • Si eres inmortal, puedes hacer todo lo que quieras, nunca vas a morir. Y no tienes miedo a caerte y hacerte daño, ¿Puedes ser inmortal pero hacerte daño? (Se plantea esta cuestión: Sí que hay sufrimiento en la inmortalidad, tanto físico como psíquico) Entonces no quiero ser inmortal si puedo hacerme daño.
Si eres mortal, vives mejor la vida. La vida es más divertida. La vida es como un baile (se ponen a bailar dejan de hacerlo al rato). ¿Ves? Cuando acaba el baile, acaba la vida.

(La vida es diversión, placer, pero todo tiene un final, con el fin de la canción, se acaba el placer y la diversión, pero mientras sucedía el baile, se disfrutó).

¿Hay cosas que le dan sentido a la vida de todo el mundo? ¿Las cosas que le dan sentido a tu vida son las mismas que dan sentido a todas las demás personas? (Grupo 7-10 años)

  • Claro que no, mi vida tiene sentido porque tengo las cosas que a mí me gustan. No pueden ser las mismas cosas que le gustan a otra persona.
  • Claro, el sentido de la vida de un niño que trabaja en otro lugar del mundo a mi misma edad para poder comer, no es el mismo que el mío. Ahora mismo mi sentido de la vida es jugar al Minecraft, para ese niño será ir a casa para estar con su familia.
  • Sí que hay cosas que le dan sentido a la vida de todo el mundo. Por ejemplo, la familia es muy importante, el amor y el sentirse querido. El odio, la venganza, no da sentido a la vida. Pero, hay casos que no puede darse ese sentido. Porque habrá gente que no tenga familia, ni sienta amor, ni sea querido. Por ejemplo, los vagabundos, querrán sentir eso, pero no lo tienen, no sé por qué. Pero yo si lo tengo y eso aunque lo considero para todo el mundo no se puede hacer. (¿Entonces hay cosas que le dan sentido a la vida de todo el mundo? Antes has dicho que sí) Pues ahora digo que no. No sé, cada persona es diferente y sus pensamientos también.
Algunas de las preguntas cogidas de la bolsa por el grupo 7-10 años
«Pan de muerto» cocinado por la mamá de Manuel para la sesión

Enlaces recomendados:

-Coco, Disney dirigida por Adrián Molina y Lee Unkrich.

¡Mortal! de Wonder Ponder

Dia de los Muertos | Film School Shorts

El Pib celebración en la península de Yucatán. Idioma Maya

El origen de Halloween – Destripando la historia

-Artículo de opinión: «Nos disfrazamos en Halloween pero no hablamos de la muerte» de Carolina García, en El País.